Categorías
Espiritualidad

Arderás.

Solo una amenaza global hace que los humanos vean la realidad desde otra perspectiva. La amenaza no será causada por la acción del hombre.

Un tremendo temblor estremecerá la tierra , dando lugar al primer aviso.

Una profunda tristeza embargará el corazón del puro. Sabrá que su oración no ha calado en lo más profundo del corazón humano.
Corazones llenos de avaricia e injusticia, arrastrados por la semilla de la corrupción, desprecian al prójimo hasta el punto de que sus lamentos les resultan indiferentes.

El sacrificio del papado no será suficiente para aplacar el deseo del ANGEL.

El tiempo de esta civilización se agota, las huestes del ángel del FUEGO reclaman su intervención en este plano material.

Mira y contempla todo cuanto tienes a tu alrededor. Aquello que percibes será transformado en cuestión de segundos. Ellos reducirán la materia a cenizas juzgando a vivos y muertos.

Los templos de oración se llenarán de almas en busca de  salvación.

Arderéis junto a esa mayoría de almas corruptas que abandonan este plano a diario. Almas que solo causan dolor y sufrimiento en aquellas que son iluminadas por decisión del creador.

Eres conocedor del MAL en su esencia más pura. Eres igual que ese vulgar y miserable ladrón que roba las pocas monedas que tiene el pobre en su cesta. Eres el que roba la ilusión del niño hecho hombre, y el hombre hecho espíritu.

Cuando el espíritu se hace visible ante la materia, es siempre con el propósito de revelar una pequeña parte de LA VERDAD.

Por tu delito, conocerás y experimentarás el verdadero DOLOR. Un dolor que no puede describirse con palabras, un dolor que pertenece a otra escala dimensional.

Deberás comprender:

7     – Representa la totalidad del universo en movimiento.
Cuando Pedro le preguntó a Jesús cuántas veces tenía que perdonar a alguien, este le contestó: “No te digo: Hasta siete veces, sino: Hasta setenta y siete veces”. Así, con la repetición del 7, recalcó la idea de que había que perdonar indefinidamente, o sin límite (Mateo 18:21, 22).

22  – Amplía y sintetiza los poderes de la vibración once.

5    – Es el número de la gracia de Dios.

Autor:  De la Fuente.

Debido a problemas de salud estaré un tiempo desconectado del Blog.

Un fuerte abrazo a todos.

Categorías
Espiritualidad

Magos y Hechiceros.

Ante todo existió el Caos, después la Tierra de gran seno, residencia, nunca destruida, de todos los seres y el Amor, el más hermoso de los dioses inmortales, que adormece los miembros y despierta, en el pecho de todos los dioses y de todos los hombres, el espíritu y la prudente voluntad.

Del Caos surgieron Erebo y la sombría Noche. De la Noche, a continuación, nacieron el Éter y el Día. La Tierra, por su parte, dio a luz un hijo tan grande como ella, el Cielo estrellado, con el fin de que la cubriera completamente y fuera para los dioses bienhechores una residencia jamás destruida. Después engendró las altas Montañas, agradable retiro de las diosas,las ninfas que habitan en sus valles. La Tierra produjo también el esteril mar, que se mueve de forma impetuosa, el Pontos, sin recurrir al amable Amor. Pero más tarde se unió al Cielo y engendró el Océano, de profundos remolinos, y a Creyo, Ceos, Hiperión y Yapeto, Teia, Rea, Temis y Mnemosina, Febe, con la corona de oro, y la amable Tetis. Después de estos seres divinos nació el más joven, Cronos el astuto, el más dudoso de sus hijos, que se puso a disputar con su fecundo padre. Alumbró todavía a los Cíclopes, con el corazón lleno de violencia, a Brontes, Esteropes, Argos, de corazón violento; ellos eran, por lo demás, semejantes a los dioses, pero no tenían más que un solo ojo en mitad de la frente y poseían el vigor y la habilidad para los más complicados y difíciles trabajos.

Una vez más nacieron hijos de la unión del Cielo y la Tierra, tres hijos de una gran fuerza y tamaño,cuyo nombre es tenebroso: Cotos,Briareo y Gías, orgullosos y de cuyos hombros surgían cien brazos terribles, sobre sus cuellos se destacaban cincuenta cabezas y su invencible vigor y potencia les daba una tremenda apariencia.

Porque entre todos los hijos nacidos de la Tierra y el Cielo éstos eran los más temibles, y su propio padre les tenía aversión desde su origen.Apenas nacían los ocultaba,sin dejarles ver a la luz del día,encerrándoles en el seno de la tierra.Esta obra detestable alegraba al Cielo,pero, en su profundidad,la Tierra lloraba,porque siendo enorme,sufría, y por ello meditó una cruel perfidia.Con gran rapidez,creó la materia del brillante acero y construyó una enorme guadaña, explicando su intención a sus hijos, y para darles valor les dijo con el corazón lleno de cólera:

Hijos, nacidos de mí y de un padre insensato, si me queréis obedecer nos vengaremos de su cruel ultraje, porque aun siendo vuestro padre, él ha sido el primero en planear acciones indignas.

Fuente:
La Teogonía

Autor:
Hesíodo